portal mesianico sefardita
  • INICIO
  • PIDAMOS SER RESTAURADOS!
  • LA OBEDIENCIA: REQUISITO ESCENCIAL PARA LA RESTAURACION
  • LA VERDADERA EMUNAJ ESTA BASADA EN YAHSHUA
  • ¿SE HA PERDIDO EL COMPUTO DEL TIEMPO?
  • REFLEXIONES DURANTE JAG JA MATZOT -- ENLACE
  • SIGNIFICADO DE ELIJOM Y PROPOSITO -- ENLACE
  • LIBERANDO A ISRAEL DEL ERROR EN LA CUENTA DEL OMER -- ENLACE
  • USTEDES YA TIENEN UN RABI -- ENLACE
  • LA PALABRA ALELUYA:CLAVE PARA ENTENDER EL NOMBRE DE YHWH
  • ¿PARA QUIEN ES LA TORAH? ENLACE
  • LA CABALA Y SU ORIGEN PAGANO ENLACE
  • LAS TRES PRINCIPALES RESURRECCIONES
  • PUBLICACIONES DISPONIBLES EN ESPAÑOL POR CORREO REGULAR O EMAIL -- GRATIS -- ENLACE
  • VERSIONES DE LA ESCRITURA KODESH DISPONIBLES
  • ACERCA DE LA IDENTIDAD DE ISRAEL, JUDAH, EFRAYIM, HEBREOS, ETC
  • ¿PUEDEN PERDERSE LOS SALVOS?
  • EMISORAS DE TELEVISION ISRAELI
  • EL MISTERIO DE LOS DOS REINOS DE ISRAEL
  • LAS DOS CASAS DE ISRAEL
  • MENSAJES EN AUDIO DE DIEGO ASCUNCE
  • CALENDARIO KODESH DE YAHWEH - ENLACE
  • EMISORAS DE RADIO
  • EMISORAS DE TELEVISION DE ESPAÑA
  • VERDAD Y HEREJIA DE LOS REYES DEL NORTE Y DEL SUR -- ENLACE
  • EL MISTERIO DE LA CUENTA DEL OMER -- ENLACE
  • ¿COMO SERA LA VIDA EN LA FUTURA FAMILA DE ELOJIM? -- ENLACE
  • LOS DIEZ MANDAMIENTOS DE YAHWEH: INTRODUCCION
  • ¿QUE REPRESENTAN LAS CARTAS A LAS SIETE IGLESIAS?
  • EL GRAN DIA DE LA IRA DE YAHWEH
  • DOCTRINA DEL SHABBAT LUNAR: SUS PIEZAN NO ENCAJAN!
  • LA FALTA DE ENTENDIMIENTO PROFETICO: UN INNECESARIO MISTERIO
  • ¿QUIEN ES REALMENTE LA BESTIA APOCALIPTICA?
  • LA VERDAD Y LA HEREJIA: EL REY DEL NORTE Y DEL SUR
  • COMO ATENDER CORRECTAMENTE A SU LLAMADO DIVINO
  • EL ROL DEL DIEZMO EN LA CONSAGRACION DE LOS FUTUROS REYES Y SACERDOTES
  • EL TRIGO Y LA NOVIA DEL CORDERO
  • ¿ESTA USTED PREPARADO PARA RESISTIR LA BESTIA?
  • ¿CUAL MUERTE HEREDAMOS DE ADAM, LA FISICA O LA ESPIRITUAL?
  • TRADUCCION KADOSH ISRAELITA MESIANICA DE LA TORAH
  • ¡EL NOMBRE DEL PADRE YAHWEH ESTA EN LOS NOMBRES DEL HIJO Y DE LA CIUDAD SANTA
  • LA DESTRUCCION DEL 2do TEMPLO
  • EL NOMBRE DE YAHWEH ESTABA EN LAS ESCRITURAS
  • ¿QUE SUCEDERA EN LA TIERRA DE AQUI A MIL AÑOS MAS?"
  • ¿SERA CIERTO QUE PARA JUDIOS Y GENTILES HAY LEYES DISTINTAS?
  • EL SUPERLATIVO TRATO DE YAHWEH HACIA SU PUEBLO
  • DICE LA GENTE POR AHI..."YAHWEH ES AMOR"...SIN SABER LO QUE DICEN
  • TÉRMINOS ESENCIALES PARA ENTENDER LA PROFECIA
  • ¿ESTUDIA USTED LA ESCRITURA CORRECTAMENTE?
  • LISTADO DE PECES KOSHER
  • "YAHUSHUA, ¿CUAL SERA LA SEÑAL DE TU VENIDA?"
  • ¿HA MEJORADO O EMPEORADO LA HUMANIDAD A TRAVES DE LOS SIGLOS?
  • LA PRE-EXISTENCIA DE YAHUSHUA: ¿MITO O REALIDAD?
  • ¿POR QUE LOS YEHUDIM SE CUBREN LA CABEZA PARA ORAR?
  • VERSIONES DE LAS ESCRITURAS DISPONIBLES
  • EL VELO EN EL HOMBRE Y EN LA MUJER
  • APUNTES SOBRE LA CAIDA DE BABILONIA Y EL DESPLOME ECONOMICO DE LOS E.E.U.U.
  • ¿PUEDEN LAS MUJERES SER PASTORAS?

diagramas utilizados en el texto.

Izq: diagrama erróneo del "dia largo de Josué."                              der: diagrama correcto del "día largo de Josué."
               
                ANTIGUO ARTICULO DEMOSTRANDO QUE LA CUENTA DE LA SEMANA NUNCA SE HA PERDIDO. 



            "¿Se ha perdido
       el cómputo del tiempo?"




                                   Muchos alegan que el Shabbat se ha perdido. 

                  Otros han adoptado un calendario lunar para demarcar los shabbatot.  

         ¿Se ha perdido realmente la cuenta semanal con los cambios del calendario?  
                                                     Veamoslo a continuación.







Por:  Herbert W. Armstrong
(títulos paganos substituídos por los nombres kodeshim)

 

 ¿Se Ha Perdido el Cómputo del Tiempo?  ¿Es posible saberlo?

 
 ¡Si — usted puede estar seguro --  usted puede comprobar cuál día de la semana es ahora el mismo séptimo día en que Yhwh descansó,  el día que El bendijo y apartó al efectuar la creación.    ¡He aquí la verdad evidente -- siete particulares pruebas — cada una conclusiva e irrefutable!  

¡Si, ahora podemos estar seguros!
 

ADMITIMOS que la Biblia dice que el séptimo día es el Sábado del Adón nuestro Elojim.


Admitimos también que al efectuar la creación Yhwh Elojim santificó el período de tiempo
que abarca el séptimo día y que nos manda observarlo; santificándolo.  

Las interrogantes  


¿Pero cómo podemos saber cuál es ahora el verdadero séptimo día que Yhwh  bendijo y
santificó en la creación?    ¿Se ha perdido realmente el cómputo del tiempo?

¿Ha sufrido cambios el calendario?   
¿Es verdad que en una ocasión se le suprimieron diez días?

¿Y afecta el cálculo del tiempo el hecho de ser redonda la tierra en que vivimos?  
¿Se “gana o pierde un día” cuando se viaja alrededor del mundo?

¿Y qué hay acerca del día largo de Josué?    ¿No alteró éste el ciclo semanal?


¿Cómo podemos saber si el séptimo día de la semana fue designado propiamente de acuerdo con el calendario hebreo?
 

Para todas estas preguntas tenemos contestaciones definidas y muchas maneras de

probarlas positivamente.   
La Palabra de Yhwh dice: "Examinadlo todo, retened lo bueno". Desterremos pues todo  prejuicio.   Despojémonos de ideas preconcebidas o añejas opiniones.   Investiguemos hasta encontrar la verdad.  

Alteraciones en el calendario  


El calendario que está ahora en uso, el romano, sufrió cierto cambio en el pasado pero ese 
cambio no interrumpió el ciclo semanal.

Antes de ser modificado, se le llamaba calendario juliano, por haberse originado en los días 
de Julio César, en el año 45 a. de J.C. Y en vista de que la variación a que nos referimos  fue ordenada por el Papa Gregorio, desde entonces se le conoce con el nombre de  calendario gregoriano.    El calendario juliano era imperfecto — insertaba años bisiestos con demasiada frecuencia.

Allá por el año 45 a. de J.C., se suponía que el año constaba exactamente de 365 y ¼ días, y para tomar en cuenta el cuarto de día extra cada año, aumentaban un día al mes de febrero cada cuatro años.


Pero más tarde se dieron cuenta de que el año era 12 minutos y 14 segundos más corto que los  
cálculos que tenían.

Consecuentemente, ya para el tiempo del Papa Gregorio, el calendario se había alejado diez días de las estaciones, y como resultado de ello, el equinoccio de la primavera caía el 11 de marzo, en lugar del 21 de dicho mes.


Para corregir esa irregularidad suprimieron diez días al calendario. Pero sólo se restaron al número de días del mes, no al número de días de la semana. 
Cierto individuo llamado Lilio propuso, y fue aceptado, el método para hacer tal supresión.

En la Enciclopedia Católica Vol. 9, Pág. 251, bajo el artículo "Lilio", en la sección que explica este 
cambio, leemos: "Y así, cada proposición imaginable fue presentada; sólo una idea no fue mencionada jamás, a saber, el abandono de la semana de siete días".

En dicha Enciclopedia, Vol. III, Pág. 740 bajo el artículo "Cronología", dice lo siguiente:


"Es notorio que en el período cristiano jamás ha sido interrumpido el orden de días de la semana. Por lo tanto, cuando Gregorio XIII reformó el calendario en 1582, el jueves 4 de octubre fue seguido por el viernes l5 de octubre.  
De manera que en Inglaterra, en 1752, el miércoles 2 de septiembre, fue seguido por el jueves 14 de septiembre".

Puesto que los católicos cambiaron el calendario, la Enciclopedia Católica es la mejor autoridad histórica que hay sobre esta cuestión y es prueba positiva.  
Para que el lector pueda entenderlo claramente y ver cómo se hizo dicha modificación, en seguida
reproducimos el calendario efectivo.  
El cambio se llevó a cabo en España, Portugal e Italia, en el año 1582.  

He aquí pues el calendario correspondiente al mes de octubre de 1582:
 

 

                                                                  

 

Notará usted que fueron quitados diez días. Un día fue el 4, y el siguiente fue el 15 de octubre.    Sin embargo, el 4 fue jueves, y el día siguiente viernes.   Para hacerlo aun más claro, explicaremos que el 29 de septiembre en ese año, fue un Sábado.  El 30 fue domingo. El 10 de octubre fue lunes, el 2 martes, el 3 miércoles, el 4 jueves y el siguiente día fue viernes, pero no 5, sino el 15, seguido del Sábado 16.

Realmente el Sábado 16 cayó sólo una semana (siete días) después del Sábado anterior, o  sea el 29 de septiembre.   Transcurrieron exactamente siete días, siete ocasos desde un Sábado hasta el siguiente.

La modificación en el calendario de ninguna manera cambió el Sábado, o la sucesión de los   días de la semana.   Las naciones británicas rehusaron cambiar el calendario cuando el Papa lo ordenó.   Siguieron con el antiguo calendario juliano hasta 1752. Y aunque el número de sus días en el mes era diferente, sus días de la semana eran los mismos que en Roma.

Los que guardaban el Sábado en Inglaterra, guardaban el mismo día Sábado que era así  llamado en Roma.   Los que observaban domingo, observaban el mismo día, tanto en Roma donde el calendario   había sido alterado, como en Londres donde no había sido cambiado.

Los países británicos modificaron el calendario en 1752. Ya para ese entonces era necesario quitarle 11 días.   El cambio se hizo en septiembre de la siguiente manera:

 

                                                                  SEPTIEMBRE 1752

 

                                                            

 

Pero en Rusia no fue cambiado el calendario hasta hace muy poco.


Consecuentemente, en el año 1907, al día que nosotros llamamos 14 de agosto, los rusos  le llamaron 1 de agosto.   Aunque nuestros calendarios tenían una diferencia de 13 días, en ambos países llamamos a ese mismo día, Sábado.    En ambos países el Sábado cayó en el mismo día de la semana. El calendario fue cambiado en Rusia a partir de entonces, pero todavía su domingo es nuestro domingo — y su Sábado nuestro Sábado.

Para referencia, vea el artículo "Cronología" antes citado, en la Enciclopedia Católica.
Y así, vemos que el calendario que ha estado en vigor desde el año 45 a. de J.C., mucho antes   de que Yahushua n naciera, prueba que nunca ha habido ningún cambio en el siclo semanal desde el tiempo de Mashiaj hasta ahora. El Sábado de hoy, es el mismo séptimo día de la semana que era  Shabbat/Sábado en el tiempo de Yahushua. Por lo tanto, podemos estar seguros de que   guardamos el mismo día santo que Yahshua guardó, dándonos ejemplo — el mismo día del  cual dijo ser Adón (Marcos 2:28).

Ganando o perdiendo un día

al dar la vuelta al mundo  

Consideremos ahora el argumento de "ganar o perder un día", según la dirección en
que viajemos al darle la vuelta al mundo.

¿Se ha detenido usted a pensar alguna vez cómo pudo Jonás hallarse en un mar tempestuoso y ser tragado por el gran pez?

Yhwh ordenó a Jonás que llevará a cabo cierta misión. Pero Jonás no quiso obedecer, y hallando una nave que partía para Tarshish se embarcó en ella con la intención de escapar "de la presencia del Eterno".   Lea Jonás 1:1-3.

¿No era insensato Jonás al pensar que huyendo de su casa en un barco, podía evadir el mandato de Yhwh?

Hay muchos modernos Jonases en la actualidad que tratan de convencernos que cierto mandamiento, proclamado por voz propia del ETERNO a toda su congregación, en realidad no puede ser obedecido, si nos embarcamos y nos alejamos de nuestros hogares,   ya sea rumbo al este o al oeste.  Se trata del mandamiento que dice: "Acuérdate del día de reposo para santificarlo... Mas  el séptimo día es reposo para el Yhwh tu Elojim".

 ¿Complicó Yhwh este mandamiento de tal manera que para obedecerlo se necesita la ayuda de un astrónomo?

 Tal vez a algunos que no se detienen a pensar muy profundamente les parece que uno pierde un día si viaja hacia el oeste alrededor del mundo — o que gana un día si viaja rumbo al oriente. Pero esa pérdida o ganancia es aparente, no real.

Calcule lo que sucedería si eso fuera verdad. Imagine que dos hermanos gemelos le dan la  vuelta al mundo y que uno toma el rumbo oeste, mientras que el otro se va en dirección al este.   Si uno pierde realmente un día, cuando el otro lo gana, entonces después de un viaje así, al encontrarse otra vez en el punto de partida original,  uno de ellos sería dos días mayor que su hermano gemelo.

¡Si continuaran viajando con demasiada frecuencia, con el tiempo, uno llegaría a tener suficientes años como para ser el padre de su propio hermano gemelo! Eso es ridículo,  porque ambos lucen  exactamente de la misma edad---ningun ha envejecido ni rejuvenecido como se plantea---pero este absurdo ilustra muy bien el asunto que nos ocupa.

Cuando una persona viaja, sus días no son de igual duración.   El individuo que viaja en avión de San Francisco a Nueva York, encuentra que ese particular día es para él de 21 horas solamente; porque el Sol se pone en Nueva York tres horas más temprano que en San Francisco, y por lo tanto hay tres horas de diferencia en tiempo entre estas dos ciudades.

Si dicho individuo regresa también por avión, encuentra que su día en el viaje de regreso es calculado como de 27 horas.   Si él sale de San Francisco a las 5 de la mañana, llega a Nueva York exactamente doce horas más tarde, su reloj marcará las 5 de la tarde, pero todos los relojes en Nueva York registrarán las 8 de la noche.  Para ajustar su tiempo con el de los neoyorquinos, él tendrá que adelantar su reloj tres horas.

Si continuara viajando alrededor de la tierra, tendría que seguir cambiando su reloj, y a su regreso a San Francisco, encontraría que le había aumentado 24 horas, por supuesto al reloj únicamente.

 ¿Pero aumentó realmente un día a su vida? ¡Claro está que No!

 El único cambio que se efectúa es en la manera de contar el tiempo, según el hombre. Este es sólo un argumento engañoso, usado por algunos para confundir a las mesas y para auto justificarse por su desobediencia a los mandamientos de Yhwh.

¡PECADO es la trasgresión de la ley (1 Juan 3:4) y la paga del pecado es la MUERTE! (Ro. 6:23).

¿Qué es un día?



La correcta definición bíblica de un "día" no es el período de 24 horas que marcan los relojes de  hechura humana, sino ese período de tiempo que hay entre un ocaso y otro.   Un día no se mide por la rotación de la tierra más nuestro andar sobre ella.

El Sábado debe ser observado "de tarde a tarde" (Lv. 23;32).

Un día termina, y otro comienza, cuando el Sol se pone (vea Marcos 1:32; Lucas 4:40, etc).   Consulte también cualquier Enciclopedia si tiene dudas y quiere verificarlo también con documentos seculares.

La historia demuestra que hasta unos cuantos siglos después de Yahushua, siempre existió la   costumbre de empezar y terminar los días a la puesta del Sol.

Vivimos en una tierra redonda.   Los días se miden por la rotación de la Tierra sobre su eje, en relación con el Sol.   Puesto que el día Sábado empieza y termina a la puesta del Sol, nosotros empezamos la   observancia del Shabbat/Sábado a la hora en que el Sol se pone en el lugar en que nos hallamos.

Por ejemplo, el Sol declina 3 horas más temprano en Nueva York que en California, EE.UU.,   y en consecuencia, los neoyorquinos observantes del Sábado, principian a santificarlo 3 horas antes que los californianos.    En Londres el Sábado empieza ocho horas más temprano que en la costa del Océano Pacífico de los Estados Unidos, y quienes lo observan, lo hacen según las instrucciones de Yhwh.

La contestación a todo esto es:

Guardamos el día cuando el día llega a nosotros.

Jerusalén es el centro principal de operaciones de Yhwh Elojim en la tierra. Allí fue donde Yahushua guardó el Sábado ¡y sabemos que El guardó el día correcto!

Algunas autoridades creen que Yhwh  guió a los hombres cuando establecieron la "línea  internacional de demarcación" (donde en virtud de que la tierra es redonda y gira sobre su eje,  un día debe ser sustraído o agregado en la computación) en medio del Océano Pacífico, donde no afecta virtualmente a nadie, y casi exactamente OPUESTA a Jerusalén.

De la manera que se calcula ahora el tiempo, los observantes del Shabbat/Sábado, guardan el mismo día en todo el mundo, cuando éste llega a ellos, el cual es y siempre ha sido el séptimo día de la semana en Jerusalén.

Pero por la simple razón de que la Biblia nos manda comenzar nuestro Sábado a la puesta del Sol, y el Sol no se pone a la misma hora en todas partes, las horas santas del Sábado empiezan, en China, varias horas antes que en Jerusalén — y en Estados Unidos varias horas más tarde que en Jerusalén.

Pero, empezando en el centro del Pacífico, la mitad del trayecto alrededor del mundo desde  Jerusalén, todos en cada rincón de la tierra guardan el mismo día conforme éste llega a ellos,  que es observado en Jerusalén cuando ese día llega allí.

Los observantes del domingo no tienen ninguna dificultad en calcular cuándo llega el domingo a ellos, no importa la parte del mundo en que se encuentren. ¡No podemos huir de esta verdad embarcándonos en un navío!

El día largo de Josué  

Hay todavía otro argumento. La narración sobre el día largo de Josué, cuando el Sol se detuvo   por "casi un día entero", es mal interpretada por muchos en sus esfuerzos por demostrar que el  domingo es el séptimo día de la semana.

El relato bíblico acerca de ese singular día se encuentra en Josué 10:12-14. "Entonces Josué habló al Eterno... y dijo en presencia de los Israelitas: Sol, detente en Gabaón; y tú luna, en el Valle de Ajalón. Y el sol se detuvo y la luna se paró... y no se apresuró a ponerse casi un día entero".

Basado en el pasaje anterior alguien formuló un argumento un tanto ingenioso ilustrándolo  con su respectivo diagrama intentando así demostrar que el domingo de hoy es realmente la  continuación del séptimo día de la creación. La esencia del argumento es como sigue:

"Josué indicó que la posición en que él colocó al Sol y la Luna cuando expidió su orden,  fue a sólo unos minutos de entrar éstos en conjunción. Por lo tanto, esa semana tuvo un  período de 24 horas sin las correspondientes salidas y puestas de Sol... El Profesor Totten ha demostrado claramente que la conjunción debió haber ocurrido el martes a las 11 y 13 minutos de la  mañana... De acuerdo con el diagrama adjunto, aparentemente esa particular semana, de un Sábado al otro, vio sólo seis amaneceres y seis ocasos, aunque sí contuvo los siete períodos nominales de veinticuatro horas... contando de acuerdo con los períodos de veinticuatro horas, se ve que el  Shabbat/Sábado es el séptimo día.

Sin embargo, si numeramos los días conforme a las puestas de Sol, entonces está claro que el   domingo se convierte en el día séptimo de la creación".

Vea en la página 7 el diagrama "A" que se emplea para presentar este argumento:

Con seguridad el lector puede darse cuenta en qué consiste el error de este argumento y su  diagrama. En primer lugar, se afirma que: "de acuerdo con el diagrama adjunto, aparentemente esta particular semana vio sólo seis amaneceres y seis ocasos".

Eso es cierto, de acuerdo con este diagrama, ¡pero no de acuerdo con la Palabra de Yhwh!

¿Dónde está el error?

Simplemente en que pasan por alto que Yhwh dice: "De tarde a tarde guardaréis vuestro reposo".    Los días de la semana se cuentan de ocaso a ocaso, según la medición de tiempo descrita en el primer capítulo de Génesis. Para indicar lo que es cada día, se declara: “y fue la tarde y la mañana un día" — "y fue la tarde y la mañana el día segundo", etc., etc.     En ninguna parte dice la Palabra de Yhwh  que las primeras 24 horas fueron el primer día, y que las siguientes 24 horas el segundo

día, etc. ¡Yhwh no cuenta el tiempo con relojes de hechura humana! El cuenta los días de  acuerdo con la puesta del Sol.

Ahora bien, en el diagrama anterior, producto de la imaginación humana, encontramos que el hombre que lo diseñó llamó al día largo de Josué "dos días" — martes y miércoles.

 ¿Está en armonía con la Biblia dicha aseveración?   ¿Llama la Biblia a ese día largo dos días?


Note que en Josué 10:14 al referirse a ese particular día, dice claramente: "ni antes ni después de él".    La Biblia lo llama un día. Pero para tergiversarlo y conformarlo a la vasta y popular senda que   siguen los observantes del domingo pagano, tienen que contarlo como dos días. Pero eso es contrario a las Escrituras.

Por otra parte, este sutil argumento confunde al lector si numera los días de acuerdo con períodos de 24 horas y luego de acuerdo con las puestas de Sol.   El autor del argumento usa períodos de 24 horas para hacer aparecer el viernes como Sábado.
El verdadero sexto día de la semana aparece como el séptimo, o sea el Sábado.

Luego vuelve a numerar esos mismos días de acuerdo con las puestas de Sol, para hacer  que el domingo figure como el séptimo día.  Es muy ingenioso, ¡pero es una falacia! No podemos calcular el período de tiempo que  contienen los días con términos de 24 horas.    Yhwh  cuenta los días desde cada puesta de Sol.

El día largo de Josué contuvo aproximadamente 48 horas de un reloj de manufactura
humana, pero fue sólo un énico período duirno; la Biblia lo llama un día, y específicamente dice que fue  diferente a otros días — "y no hubo día como aquel". No dice "días", sino "día". El pronombre  "el" es singular, ¡sólo un día! ¡Así lo dice Yhwh! La semana de Yhwh no está compuesta de  siete períodos de 24 horas, sino de siete días, contando desde cada atardecer o puesta de Sol.

El diagrama "B" también en la página 7, demuestra esta verdad de acuerdo con la Biblia y de acuerdo con el cómputo que Dios hace del tiempo.

 Un ardid para engañar  

¿Notó usted el estratagema que se empleó en el primer diagrama para engañar al lector?

El "día largo de Josué", como claramente se le califica en el diagrama — un día — está marcado "martes y miércoles", como si éste fuera dos días. En la parte inferior del diagrama se le nombra el  tercero y el cuarto día de la semana — dos días.

Luego en la parte superior, está renumerado de diferente manera — como un día, el "3" de la semana. Y llegamos al día nombrado "Sábado" si contamos el día largo de Josué como dos días. Calculando de esa manera, tal día aparece en la línea inferior como el séptimo de la semana.

Luego en la línea superior al renumerar dicho día como uno — el tercero de la semana — el que el autor del diagrama llamó jueves, viene a ser el cuarto día, el viernes el quinto, y el Sábado el sexto.  Esto, naturalmente hace que el domingo aparezca como el séptimo día de la semana.

Ahora bien, este "día largo de Josué" no puede ser dos días — el tercero y el cuarto día de la semana — como está numerado abajo, y también al  mismo tiempo, ser sólo un día, el tercero, como se indica en la columna superior.

 ¿Cuál es, el tercer día de la semana — martes, o el tercero y cuarto, martes y miércoles?   Puesto que la Biblia lo llama "un día" y no dos días, es sólo un día, martes, el tercero de la  semana, como lo indica el diagrama correcto.

El error del primer diagrama consiste en que a este particular día en un lugar se le considera como uno solo y en a otra sección como dos días.  En realidad fue sólo un día, martes, el tercero de la semana.    En consecuencia, al día señalado como Shabbat/Sábado en dicho diagrama, no es Sábado, sino realmente viernes, el sexto de la semana. Y el séptimo día no debe ser llamado domingo, sino Sábado/Shabbat como en el segundo diagrama. ¡Y así exactamente fue contado en la historia!

Es evidente que este primer diagrama es un fraude.

Pero ahora, para comprobar todo el asunto, recordemos esto: Para establecer cuál día es el verdadero Sábado — el verdadero séptimo día de la creación, que Yhwh apartó como tiempo santo, basta con regresar al tiempo de Yahushua.

Porque si este argumento del día largo de Josué es cierto, entonces Jesús profanó el Sábado, cuyo período de tiempo Yhwh  santificó, y observó el sexto, no el verdadero séptimo día. Y si nosotros  acusamos a Yahushua de tal profanación, le acusamos de haber cometido pecado, porque el pecado es la trasgresión de la ley ¡y nadie discutiría que el punto de la ley correspondiente al Shabbat/Sábado estaba abolido durante la vida de Yahushua!

¡Si El pecó, no tenemos esperanza!

Pero sabemos que Jesús conocía cuál era el día correcto.  El fue el Creador y Adón de ese día (Marcos 2:27-28).   El guardó el verdadero Shabbat/Sábado, y el registro del calendario comprueba que el Sábado de  hoy es exactamente el mismo séptimo día que Yahushua  observó.

¡Y si nos llamamos sus seguidores/talmidim, ciertamente debemos desear observar el mismo día que  Yahushua observó!


¿Se perdió el cómputo del tiempo

entre Adán y Moisés?

 

Adán había sido creado y tenía vida cuando llegó la puesta del Sol del sexto día de la semana  de la creación — cuando descansó Yhwh  de su obra.

Adán sabía cuál era el séptimo día.  Yahushua Jesús llamó a Abel "justo" (Mt. 23:35), de manera que  Abel guardaba el Sábado/Shabbat.   Enoc" caminó con Yhwh," luego,  Enoc guardaba el Shabbat/Sábado, y "desapareció" menos de cien años antes de Noé.

Durante toda esa época, estos hombres sabían cuál era el séptimo día.  Adán vivió 243 años con Matusalén, hasta que Lamec llegó a tener 56 años de edad.   Ellos sabían cuál era el séptimo día. Matusalén vivió 600 años con Noé, y Lamec vivió con
Noé 595 años.

Seguramente aprendió Noé de ellos -- y de otros -- cuál era el mismo día séptimo. Y Noé lo  guardaba, porque Noé era un "pregonero de justicia" (2 Pedro 2:5) y la Biblia dice: "todos tus  mandamientos son justicia" (Sal. 19:172).  Sem fue justo también, y vivió hasta que Abraham llegó a tener 150 años de edad.   Noé murió como dos años antes del nacimiento de Abraham.  Abraham guardó el Sábado de Dios (Gn. 18:19; 26:5). Así también lo guardaron su hijo Isaac, su nieto Jacob y su bisnieto José — quienes todos fueron observadores justos de los mandamientos  (Sal. 119:172). No, no se perdió el cómputo del tiempo desde la creación hasta la época de  José.

Pero después de la muerte de José, los hijos de Israel (Jacob) vinieron a ser esclavos en Egipto. "Entonces", se escribe, "pusieron sobre ellos comisarios de tributos que los molestasen con sus cargas... Y los egipcios hicieron servir a los hijos de Israel con dureza, y amargaron su vida con dura servidumbre..." (Ex. 1:11,13-14).

Los egipcios no observaban el Sábado.  Ellos daban latigazos a los israelitas durante su  servidumbre como esclavos lo mismo en los Shabbatot/Sábados que en los demás días. Así que a  aquellos israelitas, por unos 150 a 175 años — varias generaciones — no les fue  permitido guardar el Sábado.   No tenían un sacerdocio. No había servicios sabáticos o religiosos. Es probable que no  hubiera educación religiosa — al menos ninguna que se permitiera en forma organizada.

Y no existía la Escritura como existe hoy— no había ningún registro escrito de la instrucción de Yhwh o de la  Ley de Yhwh Elojim.

La Biblia dice, "La palabra de Yhwh permanece para siempre" (1 P. 1:25). Si se hubiera escrito cualquier palabra inspirada de Yhwh antes de Moisés, existiría hoy.

Las primeras Escrituras fueron consignadas por Moisés, después que los israelitas fueron rescatados de la esclavitud egipcia.  La generación de israelitas que Moisés guió en el éxodo de Egipto no tenía ninguna educación o instrucción religiosa. Es probable que supieran muy poco del Sábado.   Bien pudo haberse perdido el cómputo del tiempo — para ellos. Pero, aun si tal hubiese  sido el caso, Yhwh  se lo reveló mediante milagros asombrosos.

Yhwh reveló el Shabbat/Sábado de la creación a Israel

En los días de Moisés, Yhwh  reveló el verdadero Shabbat/Sábado de la creación a todos los hijos de  Israel, mediante la lluvia del maná del cielo. Los israelitas habían sido esclavos en Egipto  por espacio de cuatrocientos años. Durante todo ese tiempo no se les permitió celebrar ningún  servicio o culto religioso.

Tampoco tenían la Biblia, ni Escrituras, ni ningún otro registro escrito que les revelara los caminos o mandamientos de Yhwh Elojim. Posiblemente ya para ese entonces ellos habían perdido el cómputo del tiempo, y no sabían cuál día era el verdadero Sábado.

En el desierto de Sin, dos semanas antes de llegar a Sinaí, murmuraron y se quejaron por falta de alimentos.   Yhwh  les dijo: "He aquí yo os haré llover pan del cielo... para que yo lo pruebe si anda  en mi ley, o no".

Esto tiene relación con nuestra actitud de obediencia a la ley de Yhwh, o viceversa.
Desobediencia es pecado. Y Moisés y Aarón dijeron al pueblo: "En la tarde (a la puesta del Sol) sabréis que el Eterno os ha sacado de la tierra de Egipto, y a la mañana veréis  la gloria del Eterno".

"Y dijo Moisés a Aarón: Dí a toda la congregación de los hijos de Israel: Acercaos a la
presencia del Eterno... Y hablando Aarón a toda la congregación de los hijos de Israel, miraron hacia el desierto, y he aquí la gloria del Eterno apareció en la nube... Y venida la tarde, subieron codornices que cubrieron el campamento; y por la mañana descendió rocío en derredor del campamento" (Éxodo 16:4-13).

Note que ese día hubo una asamblea religiosa, y la gloria de Yhwh Elojim  apareció.
Las codornices no subieron sino hasta la puesta del Sol.    ¿Por qué?

 Porque ese había sido un día Shabbat/Sábado. Al ponerse el Sol, cuando el Sábado terminó, las codornices vinieron; y el pueblo tuvo el privilegio de trabajar al recogerlas para su sustento.   A la mañana siguiente, cayó el maná. Este era el primer día de la semana. Si guardaban maná   para el día siguiente, criaba gusanos y se corrompía (versículo 20).   En el sexto día (versículo 22), recogieron doble porción de comida. Y ese mismo sexto día Yhwh  dijo: "Mañana es el santo día de reposo (Sábado), el reposo consagrado a Yhwh" (versículo 23). "Y ellos lo guardaron hasta la mañana... y no se agusanó, ni hedió" (versículo 24).

No obstante, en el séptimo día algunas de ellos tal vez pensaron que la cuenta del tiempo se había perdido.   Eran como muchas personas de hoy en día, que no están seguras en lo que respecta cuál día es el Shabbat/Sábado, y les da igual guardar otro día cualquiera, o no guardar ninguno. "Y aconteció que algunos del pueblo salieron en el séptimo día a recoger, y no hallaron" (versículo 27). ¡En ese día Yhwh no envió nada! Vemos pues que mediante tres milagros,

Yhwh les enseño cuál día era el verdadero Sábado de la creación.   La cuenta del tiempo no pudo haberse confundido o perdido bajo el estricto régimen mosaico que imperó entre ese entonces y el tiempo de Yahushua.  Hemos demostrado que el día largo de Josué fue sólo un día, y no cambió la cuenta del tiempo en ninguna manera.

De haberla cambiado, como ya explicamos, Yahushua no habría guardado el día correspondiente.  Y así llegamos al tiempo de Yahushua, sabiendo que hasta ese entonces no se había perdido el  cómputo del tiempo.


La prueba de los judíos  

Ahora bien, si estamos convencidos de que Yahushua nos dio el verdadero ejemplo y que  El observó el auténtico día, no debemos tener más dificultades.   Note que el día que Jesús guardó conforme a su costumbre (Lucas 4:16), fue el mismo día que todos los judíos guardaban entonces, porque era cuando ellos celebraban sus servicios religiosos en la sinagoga (versículos 17 y 20).

Aproximadamente cuarenta y tres años después, los judíos fueron esparcidos por todas las  naciones de la tierra. Desde entonces hasta ahora, han estado separados, dispersos por todo el mundo.

Durante la Edad Media los judíos de China no tenían ningún modo de comunicarse con los judíos de África; ni los judíos que se hallaban en Europa con los de otras partes del mundo.  Sin embargo, hoy en día, con los medios de comunicación que hay hacia todos los ámbitos de la tierra, no encontramos que los judíos estén confundidos sobre este particular.  Todos siguen concordando en el mismo día Shabbat y nunca han discrepado.

Si el cómputo del tiempo se hubiese perdido, los judíos de una parte del mundo observarían cierto día, mientras que los judíos de otros lugares guardarían diferente día. Pero en todas partes — en cualquier nación sobre la tierra — encontramos que los judíos han estado guardando el mismo  idéntico día — el que nosotros llamamos Sábado — el verdadero séptimo día.

El judío es el milagro de toda la historia — y el judío es otra prueba de que no hemos perdido el Shabbat/Sábado.    Pregunte a cualquier judío ortodoxo si ha perdido su Sábado. Tal idea le parecería absurda. ¡El no tiene dudas sobre este particular! 
¡A los judíos les fue entregada la Torah para que la preservaran,  y ciertamente nos la guardaron hasta el presente!

 
La prueba de la Iglesia/Kejilah 

¡He aquí otra línea de prueba!

Tenemos la historia de la verdadera Iglesia/Kejilah de Yhwh  siglo por siglo desde Yahwshua hasta la  hora presente. Esta ha sido siempre una Iglesia/Kehilah o Asamblea observante del SÁBADO.

Durante la Edad Media, tal como está profetizado en Apocalipsis 12:6, esta Iglesia tuvo que huir al desierto,  fuera de la jurisdicción del Imperio Romano, dominado entonces por la  Iglesia (impostora) Católica Romana.   En el año 363  la Iglesia Romana expidió el Decreto del Concilio de Laodicea, pronunciando la sentencia de muerte sobre cualquier persona que cumpliese con el mandato divino de guardar el Shabbat/Sábado.

Muchos creyentes verdaderos fueron martirizados por guardar ese día. Si  en efecto  los hombres estaban  dispuestos hasta a dar sus vidas por santificar ese día y cumplir así con los mandamientos de Yhwh,  ¿concibe usted que podían perder la cuenta del verdadero día santo?    Y continuando hasta los tiempos actuales, encontramos que esta Iglesia, la verdadera Iglesia cristiana, guarda el día que nosotros llamamos Sábado— el mismo día que los judíos han venido observando ininterrumpidamente a través de los años desde el tiempo de Yahushua  hasta ahora.


La prueba de la razón

He aquí otro argumento de prueba.

¿Por qué y cómo podría haberse perdido el cómputo del tiempo?Deténgase a pensar.
Supongamos que una persona se despierta un Sábado por la mañana pensando que es viernes, y a causa de su equívoco espera hasta el domingo pare guardar su Sábado.

Tal vez eso pueda suceder, pero para que la cuenta del tiempo se perdiera, no solamente un hombre, sino que todas las demás personas en su ciudad o pueblo — toda persona en cada provincia, estado o país del mundo entero— toda persona en cada nación sobre la tierra tendría que  despertarse en la misma mañana con la idéntica alucinación,   ¿Cree usted que eso es posible?

¡Pues usted tiene que admitir que cree semejante absurdo si piensa que el cómputo del tiempo se  ha perdido!

La astronomía lo prueba


Finalmente tenemos la prueba científica de la astronomía.   A continuación transcribimos las declaraciones gubernamentales que oficialmente se hicieron  ante la Liga de las Naciones, conforme aparecieron publicadas el 17 de agosto de 1926, en un documento oficial de la Liga.   El gobierno de Finlandia presentó la siguiente observación de uno de sus astrónomos:

"La reforma (una reforma al calendario propuesta ante la Liga para su consideración) interrumpiría la división de la semana que se ha seguido durante miles de años, y que por lo tanto es ya  sagrada costumbre inmemorial".

El gobierno de Francia presentó las siguientes declaraciones de dos de sus más prominentes   astrónomos: "Un punto esencial es el de la continuidad de la semana... una continuidad que   ha pervivido a través de tantas centurias". "La continuidad de la semana... es sin duda la  institución científica mas remota que nos ha legado la antigüedad".

El profesor D. Eginitis, director del Observatorio de Atenas, y miembro del Comité de la Liga  de las Naciones, expuso: "La continuidad de la semana... ha traspasado las centurias así como todos los calendarios conocidos y aún permanece intacta".  Y así podríamos proseguir, pero basta con las pruebas ya expuestas. Hemos presentado   la prueba de la historia, la prueba del calendario, la prueba de los judíos, la prueba de los mártires de la verdadera Iglesia, la prueba de la razón y la prueba de la ciencia y la astronomía.

Además podríamos agregar como prueba positiva la de la Iglesia Católica Romana que por siglos ha preservado intacto su domingo como el día que antecede al Sábado al séptimo día que guardó Yahushua  y que observaron los primeros apóstoles.   El sacerdote católico de la actualidad está tan seguro de que su domingo es el primer día de la semana, como lo está el judío respecto del Sábado/Shabbat de Yhwh.

¿Apartaría Yhwh  cierto día, poniendo su bendición en él (Génesis 2:1-3), santificándolo   y ordenando que fuese guardado y santificado eternamente, para luego permitir que la cuenta de ese tiempo santo se perdiera de tal modo que no pudiéramos saber cuándo observarlo?

¿Se ha perdido el cómputo del tiempo?   ¡Si en efecto  se ha perdido, usted y yo somos almas perdidas también, porque es pecado profanar el Sábado de Yhwh! Ese es el cuarto punto de  la ley.

"El pecado es infracción de la ley" (1 Juan 3:4), y si infringimos uno de sus puntos — cualquiera — somos pecadores culpables (Santiago 2:8-11).   Las últimas palabras
de Yahushua que registra la Escritura dicen: "Bienaventurados los que guardan sus (los del Padre) mandamientos {vea la Versión Moderna}, para que tengan derecho de llegar al  árbol de la vida'' (Ap. 22:14).

 

     artículos paralelos con varios detalles adicionales disponibles a través de las                                                    "Iglesias de Dios" de Armstrong   

 

http://www.thercg.org/es/folletos/tshtbl-es.html

http://www.herbert-armstrong.org/IA%20Curso%20Biblico%20Corr/Se%20ha%20perdido%20el%20computo%20del%20tiempo.pdf

Powered by
✕